Lo advirtió el domingo en una entrevista el doctor Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas de EE.UU.: que «lo peor de la pandemia de coronavirus aún está por llegar».
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«Es muy posible que veamos un aumento sobre un aumento posterior a la temporada de Navidad y Año Nuevo», señaló el experto, poniendo paños fríos optimismo por el inicio de la vacunación contra el covid-19.
Y lo dijo alguien que vive en el país más afectado en todo el planeta por la pandemia, con 19.191.583 enfermos y 333.836 muertos, según los datos de ayer de la Universidad Johns Hopkins.
El aumento de casos es algo que también se espera en Chile, como lo han adelantado varios especialistas, por la alta circulación debido a las fiestas de fin de año.
De hecho, el Gobierno se puso hace semanas en tres escenarios para mediados de enero, todos con más casos diarios que los actuales: tres mil (bajo), seis mil (intermedio) y nueve mil (grave).
En el reporte presencial de ayer entregado en La Moneda, se informó de 1.923 nuevos infectados, cantidad a la que se llegó por la realización de 23.491 exámenes de PCR.
Ello significa que la positividad alcanzó el 8,19%, el porcentaje más alto desde el pasado 23 de septiembre, cuando se registró un 8,81% con 1.372 casos y 15.573 PCR.
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El ministro de Salud, Enrique Paris, precisó que «ha habido un aumento de casos nuevos confirmados a nivel nacional del 6% en los últimos siete días y del 28% en los últimos catorce días, lo que nos preocupa».
Así, la cantidad total de infectados desde el inicio de la pandemia el 3 de marzo con el primer caso es de 602.038, con 571.674 recuperados y 16.443 muertos (aunque ayer no se informó de fallecidos, lo que fue justificado como un efecto de los días feriados, estadística que desde hoy se irá regularizando).
El infectólogo y decano de la Facultad de Medicina y Ciencia de la Universidad San Sebastián, Carlos Pérez, declaró que «hemos estado con cifras muy elevadas de nuevos contagios cada día, a veces cerca de los 2.500 por jornada. Y aparte de lo ya sabido en el sur y en Santiago, se empieza a elevar la presencia de la enfermedad en el norte. Es sumamente preocupante que se mantenga esta tendencia, pues podemos volver a situaciones como las de unos meses atrás, que queremos evitar a toda costa».
El doctor Pérez añadió que «el calor no disminuye la presencia de este virus, que se propaga con el contacto cercano. Con más reuniones sociales sin medidas sanitarias, el riesgo crece. Y como la mayor parte de la población no ha sido infectada, sigue siendo susceptible a la enfermedad, por lo que hay que mantener los resguardos».
El académico de la USS cree que «lo que viene con las vacaciones es difìcil, pues será complejo que las personas en realidad se cuiden lo suficiente o limiten su movilidad… Si la situación sigue como ahora o es peor, probablemente se mantendrán las fases 1 (cuarentena) o 2 (transición, en la que está la RM desde el 10 de diciembre) por un largo tiempo».
