La subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, salió a enfrentar la polémica que se generó durante las últimas horas producto de la emisión de un decreto que dejaría fuera del proceso de vacunación contra el covid a extranjeros que no tengan la residencia.
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Según había dicho el ministro de Relaciones Exteriores, Andrés Allamand, personas que hubiesen ingresado de manera irregular al país no tendrían derecho a la vacuna, con lo que se desencadenó una ola de reproches. Sin embargo, la declaraciones fueron mutando y como detalló esta jornada el jefe del departamento de Extranjería, Álvaro Bellolio, sí podrían acceder.
Finalmente, y considerando que el Minsal es quien tiene la última palabra en este tema, Daza explicó que «todas las personas que viven en Chile están incorporadas» en el proceso de inoculación y que deberán seguir la priorización realizada.
Así, Daza enfatizó que independiente de la situación migratoria en la que se encuentre la persona, «tiene derecho» a recibir la inoculación.
Esto, porque según dijo, quienes están «irregulares» en territorio nacional se han autodenunciado para normalizar su situación, por lo que son parte del Fondo A de Fonasa, segmento de la población incluido en el diseño del calendario.
Daza hizo presente, de esta forma, que el decreto que generó todo el «enredo», tiene como fin evitar un «turismo de vacuna».
Por eso, destacó que quienes decidan ingresar de manera fraudulenta al país para vacunarse, no tendrán acceso a la inmunización.
