Varios rostros de la televisión han decidido competir por un cupo en la Convención Constitucional. El periodista René Naranjo es uno de ellos. ¿Su motivación? Representar a aquellas personas que, viéndolo y apoyándolo en TV, lo hicieron conocido.
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Según René Naranjo, el principal desafío de la nueva Constitución será la redistribución del poder.
¿Qué te motivó a lanzar tu candidatura?
— El año pasado formamos la “Comunidad por la Dignidad”, que es un grupo de independientes que empezamos a debatir sobre temas constitucionales. Ahí están Ana María Gazmuri, Jorge Baradit. Se fue perfilando una reflexión sobre la Constitución. Mi decisión de ser candidato fue de muy última hora. Dos días antes. A mí me llegó mucho el mensaje de las elecciones: que la gente votó más por la convención constitucional que por la mixta. Fue un manifiesto que señalaba que no querían a los mismos en política.
¿Por qué vas por el distrito 8? ¿Tienes alguna conexión con ese lugar?
— Yo voto desde el plebiscito de 1988. Voto en Ñuñoa porque llevo muchos años viviendo allí, está mi familia. Pero no quería ir por el distrito 10 porque va mucha gente. En las conversaciones con Comunes salió la opción de ir por el distrito 8. Tengo amigos y amigas en otras comunas del distrito, un familiar en Cerrillos e igual he podido conectar. Lo problemas de los chilenos son bastante comunes y compartidos, aunque sean distintos territorios: se repiten en comunas de clase media como Maipú, Ñuñoa y Cerrillos.
¿Es muy difícil ir como independiente?
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—Sí, por eso optamos por ir como independientes pero con cupos de partidos. A mí me dio el cupo Comunes y yo no los conocía antes de esto. Pero está la ventaja de ser conocido, porque levantar un rostro como independiente, en tan poco tiempo, es complicado y muy caro.
¿Qué le dirías a quienes critican a los candidatos que vienen del mundo de la TV?
—Ser conocido a través de los medios es un capital. Esta es una campaña corta, falta sólo un mes y medio para la elección y es muy difícil instalar rostros nuevos. Costaría millones. En mi caso, mi capital es mi trayectoria. Y además es una oportunidad para decirle a la gente gracias por apoyarme y hacerme conocido, ahora quiero ser la voz de ustedes. Gracias por verme en programas buenos y malos también (ríe). Pero el mandato de la gente es hacer cambios profundo, con personas nuevas en la política y yo quiero ser su voz.
¿Qué es lo más importante para ti en la nueva Constitución?
—Se ha hablado mucho de los derechos que tienen que estar en la Constitución, porque hubo un estallido social que nos mostró las necesidades de la población. Y todas esas reivindicaciones son profundamente compartidas y van a avanzar. Pero para mí un tema de fondo será la redistribución del poder a través de la Constitución. ¿Quienes van a mandar? ¿Cuánto tiempo dura un Presidente? Desde 1933 la ciudadanía delega su poder en los representantes, pero después ellos deciden y a veces no hay compromiso. Hay que buscar mecanismos para que respondan a la ciudadanía. Ya no vamos a estar en las manos del 1%.
En el plebiscito de salida, ¿crees que la nueva Constitución debiese votarse por capítulos?
—Hay que generar formas de participación ciudadana durante el debate. La gente va a ver todos los debates y discusiones. Va a ser un rodeo digital que es inevitable vía streaming y online. La gente va a estar manifestándose en el momento mismo. Será una ciudadanía vigilante que va a querer opinar sobre el voto de los artículos y hay que encontrar el mecanismo.
