La Defensoría de la Niñez se querelló en el caso de la desaparición del pequeño Tomás Bravo. A los días después se decretó el secreto de la investigación, lo que se traduce en no informar ningún tipo de antecedentes respecto a las diligencias.
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Pero hoy, la titular de la institución por la infancia, Patricia Muñoz, realizó sus descargos al respecto, en su cuenta personal de Twitter, debido a la filtración de información a la prensa.
«Somos querellantes, no podemos acceder a la causa por el secreto que decreta el fiscal y en CHV el periodista cuenta todas las diligencias, el secreto al final no nos permite hacer el trabajo como institución, pero no bloquea nada en lo comunicacional, mal!!!!», escribió la abogada.
Al respecto, además sostuvo que la explicación a este hecho la debe dar «el fiscal, las policías, y si hay decisiones judiciales a los tribunales, que son quienes deben respetar el secreto de investigación… por eso no logro entender privar a querellante de acceso a antecedentes si todo se difunde igual».
Tomás Bravo de tres años lleva nueve días desaparecido y la persistente búsqueda no ha dado resultados.
El niño salió el pasado miércoles a guardar ganado con su tío abuelo, quien lo dejó un momento solo, pero al regresar al punto, Tomás ya no estaba.
