Héctor Sáez, ha sido considerado como persona de interés dentro de la investigación de la muerte del pequeño Tomás Bravo. Pero ese nombre no resuena en nadie. Es el ya conocido «Loco Memo».
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El nombre del sujeto surgió por una foto que subió a redes sociales, del lugar en donde el niño desapareció el pasado 16 de febrero. La imagen la publicó minutos antes del hecho y luego la borró.
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Esto levantó las sospechas de vecinos, que de inmediato comenzaron a hacer circular el perfil del nombre, considerado por ellos, sospechoso de la desaparición de Tomás.
La PDI ha estado buscándolo por días, para tomarle declaración, pero Sáez, en una entrevista con Chilevisión, indicó que sólo conversará con el fiscal José Ortiz y no con personeros de la policía civil.
«Quiero desmentir los lazos de amistad con el tío abuelo (de Tomás), con la mamá del niño, con la mamá de la mamá Tomasito, no tengo ningún lazo familiar ni directo de amistad con esa familia», aclaró.
Por otro lado, descartó que ese día haya estado viendo el partido de Colo Colo con Universidad de Concepción en la casa de Tomás, «yo no he estado con ellos y tampoco estuvo en la su casa esa tarde».
«Inventaron una imagen de mí, falseada, dijeron que yo vivía en las montañas, que allá tenía una cueva y no, no tengo precisamente una cueva para estar escondiéndome de nada», dijo el «Loco Memo».
«Loco Memo» no quiere nada con las policías
Sáez precisó que «no voy a colaborar en ningún momento bajo amenaza, voy a colaborar con el fiscal Ortiz y con la fiscal a cargo, y si tengo que hacerme un ADN me lo voy a hacer».
Explicó que al fiscal Ortiz lo conoce de hace tiempo, debido a que tuvo causas penales con él.
El «Loco Memo», explicó que ha recibido amenazas, desde el momento en que subió la fotografía a las redes, la cual fue tomada días antes de la desaparición de Tomás, de acuerdo a su testimonio.