La pequeña de 7 años, Maia Yael Beloso, fue encontrada la mañana de este jueves, en compañía de su captor, un cartonero conocido como «Carlitos», quien se la llevó a principio de la semana, sobre una bicicleta.
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Pero luego de conocerse el hecho mismo, salió a la luz su difícil historia de vida. Vivía en la calle junto a su madre, durmiendo sobre un colchón de goma espuma dentro de una carpa junto a su mamá.
Por este motivo, este jueves luego de encontrarla, se dispuso que la niña no volviera a vivir junto a su mamá.
Pero en las últimas semanas, la pequeña Maia no vivía sola en la carpa con Estela, su mamá, sino que también con Carlos Savanz, su secuestrador, que arregló el lugar…le puso hasta un techo fabricado con un pedazo de publicidad reciclado.
De acuerdo a Infobae, el sujeto llegó de la nada y a nadie le sorprendió su llegada, lo vieron como un gesto de solidaridad y de apoyo a la madre adicta a las drogas.
Un secuestrador preocupado
De acuerdo al citado medio, el hombre jugaba con Maia. «La alzaba, le hacía upa. Andaban en bici por las calles y por el terraplén que separa la calle de la autopista. En ese terreno amplio, con más tierra que pasto, Estela quemaba los cables para descubrir y vender cobre«.
«Hasta que apareció Carlos. Los consumos cambiaron. Iban los dos juntos al kiosco. Él le pedía que eligiera lo que más le gustara”, dicen en el barrio.