Investigadores del Instituto Politécnico Nacional de México crearon una mascarilla que solamente cubre la nariz, que se usaría para comer o beber.
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Según informó la institución mediante un comunicado, el objeto no pretende sustituir la mascarilla tradicional, «sino reforzar las medidas para cuidar la salud al realizar actividades cotidianas que requieren su retiro, como comer, beber o en consultas odontológicas».
El artículo, que fue bautizado como «mask eating», ya se encuentra inscrito ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial.
El científico de la Escuela Superior de Medicina (ESM) y coordinador del proyecto, Gustavo Acosta, señaló que la mascarilla nasal «surgió como una necesidad de contar con mayores elementos de protección sanitaria, sobre todo ante las variantes del SARS-CoV-2 que son más contagiosas».