Este lunes, en una publicación de “El Mercurio”, el ministro Enrique Paris planteó que quienes se han vacunado con dos dosis y ya han cumplido los 14 días tras la segunda inyección, podrían eximirse de algunas medidas de restricción. Entre ellas, las cuarentenas por contacto estrecho.
PUBLICIDAD
“Ya lo conversé con la subsecretaria Paula Daza: lo vamos a protocolizar con el Programa Nacional de Inmunizaciones, porque sería bueno un cambio, aunque aún no está decidido”, precisó en el citado medio.
Sin embargo, durante la pauta covid del mediodía el titular de Salud aclaró que “no es el momento”.
«No dijimos que era inmediato»
“Nosotros nunca hemos dicho que la vamos a aplicar de inmediato. No es el momento de aplicarla justamente cuando tenemos una alta tasa de circulación viral, una PCR que sigue alta y una cantidad de casos activos bien importante”, explicó el ministro.
Y los especialistas creen que, de aplicarse una medida así, tendría que ser efectivamente a futuro.
«Ni siquiera debieron mencionarlo»
Ignacio Silva, infectólogo de la Facultad de Ciencias Médicas de la USACH, advierte que “ni siquiera debiesen haber mencionado esa posibilidad. En un momento tan delicado de la pandemia, nuevamente se puede generar una falsa esperanza de normalidad próxima, y ahora es cuando más se necesita el compromiso de la población”, advierte.
Álvaro Castillo, epidemiólogo e investigador del CISS de la U. Mayor , concuerda y dice que “en este momento sería una pésima idea. Chile ya fue señalado como ejemplo de que no podemos descansar en la vacuna”.
PUBLICIDAD
El especialista advierte además que “la vacuna no evita al 100% el contagio, sólo en un 50%. Lo que evita es que las personas tengan cuadros graves”.
Sumar estrategias
El mensaje de la efectividad de la vacuna es lo que más se debe destacar comenta Erika Retamal, epidemióloga y directora del Departamento de Salud Pública de la Universidad de Talca. “No es mágica la vacuna, y hay que seguir con todas las otras medidas”, dice.
Para la especialista, es de vital importancia que el gobierno mejore la trazabilidad y también “comience a hacer vigilancia genómica, considerando las nuevas variantes”.