Son 10 jóvenes de la pequeña y aislada localidad de Corregimiento Las Canoas, en Pivijay. El poblado tiene apenas un par de cuadras, pero estos muchachos no quisieron quedar al margen de la ola de descontento y protesta en vive Colombia.
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Diseñaron carteles, sacaron un parlante y se lanzaron a marcha por una calle sin pavimento, manifestando sus deseos de un país mejor, en medio del estallido social que vive el suelo colombiano desde el 28 de abril.
En un video se ve cómo los jóvenes marchan por una polvorienta calle en total tranquilidad, en una localidad que no tiene agua potable, que su suministro eléctrico es precario y casi sin conectividad. Lo curioso, es que muchos de los habitantes del pueblo atacaron a los muchachos con gritos como “No sean payasos”, “vayan pa’ la casa” y “recójanse”.
Pero los jóvenes no se inmutaron y continuaron su marcha en total paz, pese a los ataques de los «mayores».
Estos manifestantes no buscaban fama ni reconocimiento, solo protestar por el abandono estatal en el que viven.
El fin de semana, sin embargo, una imagen de los 10 jóvenes llegó a redes sociales y en horas se convirtieron en un fenómeno viral y el un símbolo del descontento, abandono y protesta pacífica en que se encuentra el grupo de la ciudadanía colombiana.
«Estamos orgullosos»
“Estamos orgullosos de estar marcando la diferencia aquí en Canoas. Tomamos esa iniciativa cuando el pueblo no fue capaz de hacerla. Nosotros hicimos una convocatoria, creamos un grupo en el que dijimos que la marcha iba a empezar en la plaza principal. La verdad sentimos un poco de miedo, pero mi mamá hizo una oración y salimos a marchar con todas las ganas”, comentó Leonardo De La Cruz, uno de los líderes la manifestación, en una entrevista a Opinión Caribe.
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En la misma publicación, el manifestante se refirió a los ataques de algunos pobladores a los protestantes, y la respuesta fue contundente: “No le prestamos atención a eso, sino que seguimos en lo de nosotros. En hacer lo que ellos no hacen por estar esperando un cambio ahí en sus casas sentados, achantados”, dijo el joven de 21 años.
Después de la foto, se subieron videos a las redes y los «10 de Las Canoas» se graduaron de emblemas de la lucha en que se encuentra la ciudadanía colombiana.