Por cerca de cuatro horas estuvo reunida la oposición a fin de ultimar los detalles de la propuesta que harán a los movimientos sociales y al Gobierno, en el marco de la discusión de los “mínimos comunes” definidos para ir en ayuda de las familias.
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Y tras el encuentro, una de las principales conclusiones fue que la Renta Básica Universal que debe beneficiar, inicialmente, al 100% de las familias del Registro Social de Hogares (salvo los del décimo quintil de ingresos) esté un 30% por sobre la línea de la pobreza. O sea, que un hogar de una persona, en vez de recibir $176 mil, lo que corresponde al mencionado margen, reciba $229 mil. Para un hogar de cuatro personas, acordaron, el aporte llegaría a $604 mil.
“El Gobierno debe responder a esta exigencia, en circunstancias que la pandemia demanda que las personas se queden en el hogar, pero con las condiciones mínimas de subsistencia y la seguridad de poder financiarse”, aseveró al término del encuentro el segundo vicepresidente de la Cámara, diputado Rodrigo González (PPD).
En el mismo sentido, la oposición consensuó que se debe entregar un aporte directo a las Pymes para garantizar su reactivación. El plan para ir en ayuda de estas empresas, según definieron, debe superar los tres mil millones de dólares, los que se convertirán en subsidios y créditos.
En cuanto al financiamiento, advierten que lo primero será endeudamiento y recurrir a bonos soberanos.
De todas maneras, desde el sector comentaron que el texto formal que reúne todas las ideas aún no está listo, pero que se entregará a la brevedad y que contendrá las argumentaciones correspondientes.
