Tres carabineros de Iquique fueron formalizados este lunes 17 por tres cargos en el Juzgado de Garantía de esa ciudad y quedaron en prisión preventiva. Se les imputa falsificación de instrumento público, obstrucción a la investigación y abuso contra particulares. Los tres carabineros inventaron pruebas en contra de civiles, presuntamente, porque andaban buscando un celular robado.
PUBLICIDAD
Según informó el sitio web del Poder Judicial, los tres carabineros de Iquique (C.C.S., S.A.I.G. y S.F.F.) habrían realizado sus acciones el lunes y martes de la semana pasada. La jueza Tamara Muñoz Sáez ordenó el ingreso a la unidad o unidades policial que se determine por considerar que la libertad de los tres carabineros constituye un peligro para la sociedad. Fijó un plazo de 90 días de investigación.
La historia es la siguiente: a las 18 horas del 10 de mayo y hasta las 20 horas del día siguiente, los tres carabineros de Iquique se concertaron y coordinaron “para vengarse de particulares, vejándolos injustamente con la falsificación de instrumentos públicos”. Esto a su vez causó el inicio de investigaciones, las que incluso llevaron a una condena y una prisión preventiva.
Tres carabineros: el inicio
Todo partió por un procedimiento por microtráfico en que tomó parte uno de los tres carabineros de Iquique. En medio de las diligencias, cerca de las 17.20 horas del lunes 10, habría sufrido la sustracción de su celular. Así empezó con una serie de acciones para recuperarlo. S.A.I.G. se acercó antes de las 22 horas a S.F.F. y C.C.S. para comentarles que le habrían robado el celular y un tipo en particular podía saber dónde encontrarlo.
S.F.F. y C.C.S., coordinados con S.A.I.G., buscaron y encontraron a las 22.30 horas a su primera víctima. Luego la golpearon y le exigieron información de dónde ubicar a un amigo, que supuestamente habría robado el teléfono. Lo subieron al coche policial y recorrieron diversos sectores. Pero no lo hallaron y por eso los tres carabineros de Iquique le adjudicaron un delito falso de porte ilegal de arma punzante.
S.F.F. proporcionó un arma. C.C.S. confeccionó el acta de incautación, tomó las fotos y redactó la declaración del aprehensor. Todas estas falsedades las tomó el fiscal, que pasó a la víctima a control de detención e incluso logró una condena.
Tres carabineros: segunda parte
S.F.F. y C.C.S. mantuvieron la búsqueda del supuesto autor de la sustracción del teléfono. Lo encontraron a las 3.20 horas del 11 de mayo de 2021. Ahí le avisaron a S.A.I.G. Esta segunda víctima tenía un banano con una bolsa verde, con frutas y yogurt. Sin un fin que justificara la detención, lo llevaron hasta la Cuarta Comisaría. Antes de ingresar, S.A.I.G. le pidió el celular y lo amenazó con que “lo iba a cargar” si no lo devolvía.
PUBLICIDAD
Lo negó y los tres carabineros de Iquique llenaron botellas con combustible y colocaron paños en las boquillas, les sacaron fotos y generaron actas falsas de declaración del funcionario aprehensor e incautación. C.C.S. supuestamente lo había sorprendido portando en un bolso azul dos molotov. Esta información la tomó el fiscal de turno: el Juzgado de Garantía de Iquique decretó la prisión preventiva.
Entonces, a las 15 horas, con el fin de evitar cualquier investigación respecto del último procedimiento falso, que estaba revisando la unidad de asuntos internos de Carabineros, S.A.I.G. convocó a C.C.S. y S.F.F. a bomba de bencina para coordinar las versiones.