“Vocería de los Pueblos”: peticiones son “llamados” y no “exigencias”

Desde la “Vocería de los Pueblos” -como comentaron en privado varios de los constituyentes que la integran- tienen absolutamente claro que el acuerdo del 15 de noviembre establece que la Convención deberá aprobar las normas y el reglamento de votación de ellas, por un quórum de dos tercios de sus miembros en ejercicio, pero al mismo tiempo se preguntan: ¿Qué pasa si dos tercios de los constituyentes, al fijar sus reglas, definen modificar los quórum?

Lo plantean como consulta a todos quienes los han tildado de “antidemocráticos” y “totalitarios”, porque como indicaron, lo único que hicieron al plantear sus “seis garantías democráticas” es exponer cuáles son los lineamientos que sociabilizarán con el resto de los constituyentes. Se trata sólo de un “llamado” y en base a este es que quieren discutir, sin ánimo de imponer fórmulas. Al menos eso sostuvieron quienes conversaron con Publimetro.

Además, a los críticos que les advierten que tienen que respetar las normas bajo las cuales la ciudadanía los eligió, les recuerdan que siempre, durante toda la campaña, hicieron presente que no estaban subordinados al acuerdo político del 15N y que querían ir más allá. Esa, subrayan, es la máxima a respetar. 

En esa línea fueron respaldados por el candidato presidencial del PC, Daniel Jadue, quien aseveró que “siempre he sido partidario de las asambleas constituyentes de verdad y, por lo tanto, creo que lo más relevante es que el proceso llegue a buen término y eso implica que tenemos que tener la disposición de conversar todo aquello que ponga en peligro el proceso constitucional”. 

Pero fue más allá: sostuvo que si llega a La Moneda podría evaluar “hacer también los cambios al acuerdo a través de la vía institucional. (…) Tenemos que decidir ¿Es este un proceso constituyente y soberano, o es un proceso limitado y mandatado por el Congreso?”.

Y ahí encendió nuevamente las alarmas. Una de las primeras en reaccionar fue la también candidata presidencial Paula Narváez (PS), que expuso: “Me parece impresentable que el candidato presidencial, alcalde Daniel Jadue, intente pautear a la Convención Constituyente. Ningún candidato presidencial puede pautear a la Convención Constituyente, que fue electa directamente por la ciudadanía y que, además, ejercerá su trabajo cuando se instale, porque todavía ni siquiera se instala”.

Por su parte, el candidato de Evópoli, Ignacio Briones, insistió en rechazar lo expuesto por la “Vocería”. 

“Es muy importante que todos los constituyentes electos tengan voluntad de respetar las reglas bajo las cuales se fraguó este proceso y su propia elección. Quienes una vez electos desconocen eso, están haciendo trampa”, manifestó. 

En un tono bastante crítico, el vocero del Gobierno, Jaime Bellolio, recalcó que las reglas se deben respetar. “Algunas instituciones no pueden arrogarse a sí mismas poderes que tienen otras instituciones, y eso fue ampliamente discutido y ampliamente difundido. Por lo tanto, pensar que los chilenos son ignorantes es una falta de respeto gigantesca a los chilenos”, expuso. 

Considerando la serie de cuestionamientos, María Rivera, constituyente electa que suscribe la “Vocería de los Pueblos”, aseveró en entrevista con Radio Universo que le extraña que las autoridades desconozcan que se está en un proceso democrático. 

“Extraña que los políticos que han manejado el país pretendan que sea la opinión de ellos la que más vale”, planteó. Reafirmó, asimismo, que ellos tienen el  “derecho a plantear lo que pensamos. Es una discusión abierta y creemos que se están dando muestras antidemocráticas desde los partidos tradicionales”.

Efecto «Vocería de los Pueblos» ¿Los constituyentes pueden correr los plazos o renunciar?

El planteamiento que hicieron los constituyentes que se agrupan en la “Vocería de los Pueblos” dejó no sólo amplios cuestionamientos, sino también una serie de dudas sobre el funcionamiento de la Convención. 

Por ejemplo, ¿pueden ellos u otro grupo pretender aplazar el trabajo? Según comentaron fuentes de la Secretaría Ejecutiva del órgano, que nació al alero de la Segpres, una vez que sean convocados y se reúnan los 155 electos, podrán plantearse las diferentes opiniones y ahí definir qué hacer. 

¿Alguno puede renunciar? De acuerdo con algunas visiones no es posible dejar este cargo, pero desde la Secretaría vuelven a sostener los constituyentes definirán su propio reglamento y ahí se sabrá si fijarán o no mecanismos de reemplazo. 

¿Podría la Convención extender su plazo máximo de funcionamiento? Sí, pero no es tan fácil. Para prorrogar la labor más allá de los 12 meses,  tendrían que proponer una reforma constitucional a la Carta Magna aún vigente y la idea tiene que ser aprobada en ambas Cámaras en el Congreso. 

En medio del trabajo, ¿pueden los constituyentes presentar reclamos? Pueden reclamar respecto de infracciones al reglamento que definan y sobre los acuerdos generales que adopten, no sobre contenidos del texto que dio pie al proceso constitucional, y siempre y cuando la suscriba al menos un cuarto de los miembros. 

Cinco ministros de la Corte Suprema, elegidos por sorteo,  serán quienes diriman estos asuntos.