Felipe Reyes es un anciano de 108 años que deambulaba por las calles con un saco recogiendo botellas, para lograr algunos pesos y poder comer.
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No tenía casa y vivía debajo de un árbol en una plaza en Torreón, México.
Un día, Benita Dearz vio al hombre de la tercera edad caminando por la calle y le ofreció llevarlo en su auto. Y ahí conoció su historia.
La mujer aseguró que se le «rompió el corazón» cuando vio el lugar en que vivía el anciano y le dio 100 pesos mexicanos, más de 3.600 monedas chilenas.
Pero la mujer no pudo sacarse de la cabeza a la imagen de «Don Felipe» y decidió regresar por él, llevarlo a su casa, darle comida, una ducha y ropa nueva.
Nueva casa
La Dearz quedó impactada por la sencillez de «Don Felipe» y decidieron ofrecerle vivir con ellos.
“Así quedo Don Felipe, bañadito, cambio nuevo y lo mejor una cena en familia. Gracias por las compartidas, gracias por sus buenos deseos y muchas gracias por los mensajes recibidos. Este hermoso gesto hacia el (sic), es en honor a mis abuelos Blas y Angelita que están en el cielo”, explicó Dearz en su cuenta de Facebook.
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Apenas se viralizó la historia, empezó a llevar comida y ayuda diaria para el anciano de 108 años.
Tal fue el impacto que «Don Felipe» ha realizado algunas apariciones en vivo en las redes donde ha interactuado con más de 1.900.000 de personas.
