Un bombero que fue a apagar el incendio de un accidente entre tres autos se encontró con una macabra sorpresa: la única víctima fatal era su hija de 21 años. El hecho ocurrió el domingo 13 en Pembrokeshire, Gales, cuando la niña volvía de la playa junto con su novio de 22 años de edad.
PUBLICIDAD
Según publicó el diario británico Daily Star, el bombero Adrian Smith (47) se encontraba en funciones el domingo cuando se recibió el llamado a un choque de tres autos en Pembrokeshire. Así, llegó sin saberlo hasta el último lugar en el que estuvo viva su hija, Ella Brooke Smith.
El bombero encontró a la niña, una estudiante de enfermería, tendida junto a su novio, Ashden King, de 22 años, en el Ford Ka que ocuparon para ir a la playa. En Facebook, el bombero dijo: “Estamos completamente devastados por perder a nuestra amada Ella. Era una hija, hermana y nieta muy amada y cariñosa”.
La pareja concurrió al área costera de Broadhaven, también en Pembrokeshire, antes de volver el domingo por la noche, cuando se registró el incidente fatal. El auto se volcó en una curva y luego lo embistieron otros dos autos. Según la policía, la muchacha falleció en el mismo sitio. Otras tres personas quedaron con heridas de gravedad.
La hija del bombero trabajó de enfermera en práctica en el hogar residencial y de enfermería Parc y Llyn, en Ambleston. Los amigos rindieron tributo en las redes sociales a la “chica más dulce que jamás haya caminado sobre la tierra”. Uno dijo: “Esto es tan cruel. Solo esperamos que su familia pueda recordarla con tanto amor como nosotros”.