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La UEFA abrirá en las próximas horas una investigación para determinar si un grupo de aficionados húngaros cometió racismo tras insultar a varios jugadores de Francia.
Se cita entre ellos Kylian Mbappé y Karim Benzema, durante el partido de ambas selecciones (1-1) en la segunda jornada del Grupo F de la Eurocopa.
Según explica un reportero de DPA presente en el Puskas Arena de Budapest, durante el encuentro se escucharon sonidos de mono cuando el delantero francés Kylian Mbappé tocaba la pelota.
El madridista Karim Benzema, que tiene raíces argelinas, también fue insultado con racismo.
Más de 55.000 espectadores, en su mayoría húngaros, estuvieron en el Puskas Arena.
Budapest es la única ciudad anfitriona del torneo continental que permite un estadio lleno en medio de la pandemia de coronavirus.
Hungría fue castigada en el pasado por las autoridades del fútbol por racismo de sus aficionados.
Un arcoiris contra el racismo
En la jornada final de los partidos del Grupo F, que se celebrará este miércoles, Hungría se enfrentará a domicilio a Alemania.
El Ayuntamiento de Múnich pidió que el Allianz Arena se ilumine con los colores del arcoíris para el partido. Será una forma de mostrar su rechazo al racismo.
El martes, el parlamento húngaro aprobó una ley que restringe los derechos de información de los jóvenes con respecto a la homosexualidad y la transexualidad.
La ley se considera importante para el primer ministro conservador ultraderechista Viktor Orban.
