El jueves 17 de junio a media tarde, Petros Sidney Mabuza, estaba sentado el interior de su camioneta, frente a un centro comercial en la localidad de Mpumalanga, de Sudáfrica.
PUBLICIDAD
De pronto, apareció un vehículo del cual descendieron al menos tres personas, que abrieron fuego contra Mabuza. El hombre de 57 años recibió 17 impactos.
La víctima fue trasladada de urgencia al Kiaat, pero llegó sin vida producto de la gravedad de las heridas.
“Mr. Big”
Pero Mabuza no era cualquier persona. Conocido popularmente como “Mr. Big” o “Mshengu”, era señalado como el mayor capo de la caza furtiva de rinocerontes, en Sudáfrica.
Una persona, sin duda, colmada de enemigos, un amplio historial de denuncias y juicios por el tráfico y muerte de animales protegidos.
Jamie Joseph, parte de la organización Saving the Wild, defensora de los animales, reconoció que vio el cadáver y confirmó su muerte. “He visto su cara y puedo confirmarlo. Mabuza está muerto”, aseguró Joseph.
El activista afirmó que “mabuza tenía en nómina a muchos magistrados y policías y no me cabe duda de que el juicio habría sido saboteado. No hay voluntad política en Sudáfrica para salvar al rinoceronte, pero hoy se ha hecho justicia en la calle”.
PUBLICIDAD
La investigación
Sobre el crimen, el vocero de la policía de Mpumalanga, Leonard Hlathi, adelantó que “el hombre recibió un disparo a plena luz del día en la ciudad, frente a la gente y creemos que la gente ha visto y conoce a los sospechosos».
«Pedimos al público que se ponga en contacto con la policía de forma anónima”, solicitó.
Sobre la hipótesis que maneja la policía, Hlathi explicó que “no queremos especular si esto estuvo relacionado con las pandillas o no, pero la investigación nos va a guiar”.
Aún no hay arrestos por la muerte del siniestro “Mr. Big”.