La noche del 2 de julio, el matrimonio de Courtney y Kale Bucholtz estaban en la sala de estar del primer piso de su casa en Prairieville, Estados Unidos.
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Era un momento de relación después de un día agitado y aprovechando que Cannon, su hijo de cinco meses dormía en su habitación del segundo piso.
De todas formas, el matrimonio tenía conectado un monitor para seguir a su bebé, dado que estaba en el segundo piso.
Era una noche normal hasta que un fuerte ruido puso en alerta a la pareja.
El matrimonio pensó que había sido un rayo, pues en esos momentos había una tormenta, pero al ver el monitor de la pisa de su hijo descubrieron con impacto lo que había sucedido.
Impacto
Un árbol gigante que estaba a un costado de la casa había caído y por poco había aplastado al lactante.
En una entrevista a Fox News, Courtney Buchholtz narró que «cuando vi el árbol, casi no podía comprender lo que estaba pasando, que había un árbol en nuestra casa».
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La pareja subió rápidamente al segundo piso y vio el árbol al interior de la pieza de su hijo, pero afortunadamente estaba ileso.
«Le di la vuelta y lo revisé muy bien para asegurarme de que no le pasaba nada. Había estado llorando, pero tan pronto como lo tuve en mis manos, se estaba riendo mientras lo giraba», aseguró Kale Bucholtz a Fox News.
La pareja tuvo que dejar la casa por los graves daños que causó el árbol y comenzar la reconstrucción de la vivienda. La segunda, pues en 2016 la misma casa sufrió graves daños por las inundaciones que afectaron a Luisiana.