Era el domingo 5 de septiembre y en un bus del Servicio Integrado de Transporte Público (SITP) de Colombia, en la localidad de Teusaquillo se subió una pareja de jóvenes.
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A los pocos minutos, el joven se acercó al conductor del transporte público para hacerla una sorprendente petición: si podía tener sexo con su pareja en el asiento del fondo.
El chofer no supo que decir, pero al ver que la mujer se sacó los pantalones y se sentó encima del hombre, el conductor optó grabar el acto para luego denunciarlo.
Reacción de TransMilenio
Ante el revuelo que causaron las imágenes, la empresa TransMilenio condenó el hecho y llamó a la ciudadanía a denunciar actos que atenten a la «sana convivencia».
Las autoridades colombianas aseguraron que se han dispuesto cerca de 880 policías con el foco de combatir el acoso sexual en el transporte público, un flagelo común en Colombia.