Hace un par de meses, un tailandés terminó con su pene desfigurado de forma permanente, tras haberlo atascado por dos semanas en un candado.
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El hombre, soltero, de 38 años, sujetó el dispositivo de metal alrededor de la base de sus genitales en un extraño acto sexual.
De acuerdo a Infobae, el sujeto perdió la llave y su pene comenzó a hincharse.
Trató y no pudo quitar el candado pequeño, así que lo dejó en su pene durante más de 14 días hasta que se infectó y el dolor fue tan insoportable que lo llevaron de urgencia al hospital en Bangkok, Tailandia .
Su propia padre lo acompañó y le relató a los médicos que a su hijo «le gusta meter el pene por pequeños agujeros”.
Los médicos pasaron más de 30 minutos usando un cortador eléctrico para cortar la cerradura de metal. Deslizaron una delgada hoja de metal entre la barra y la piel del hombre para evitar que se cortara y rociaron agua sobre su cuerpo para lubricar.
Una vez que fue liberada, le administraron una crema antibiótica y le dieron al hombre tabletas de penicilina.