Después de nueve días de paralización, el sindicato de trabajadores de Transbank llegó a un acuerdo con la empresa y detuvo la huelga. La resolución llegó después de tres jornadas de negociación voluntaria entre ambas partes, encabezadas por la Dirección del Trabajo.
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El acuerdo implicó un bono de término de conflicto de $3.000.000 por un período de dos años, además de mejoras en los beneficios, entre los que destacan el derecho de sala cuna para papás con custodia de los hijos, aumentar el aguinaldo para fechas especiales y extender a preescolar algunos bonos de educación.
El presidente del sindicato, Eduardo Pérez, destacó: “Conseguimos cupos de renuncia voluntaria con indemnización, la posibilidad de una indemnización bastante superior al tope legal, que de aquí en adelante a ninguna persona se le descuente por necesidad de la empresa los montos del seguro de la AFC”.
A través de un comunicado, Transbank informó que «la empresa hizo un gran esfuerzo» debido a la compleja situación financiera que atraviesa, tomando «medidas extraordinarias con el objetivo de poner fin a la huelga».
El gerente general, Patricio Santelices, indicó que el objetivo fue «no afectar a los comercios afiliados y usuarios de tarjetas que forman parte de la cadena de pagos del país, particularmente de cara al fin de semana de Fiestas Patrias, que para miles de pymes es una oportunidad de reactivación tras un año y medio de pandemia».
La empresa explicó que había intentado «negociar en un año más, cuando las perspectivas de solución a los temas tarifarios estuvieran despejadas», acusando «el contexto financiero crítico» que atraviesa debido «al congelamiento de sus tarifas desde abril del 2020».
