- Periodista, fundador de diariopyme.com y de la comunidad innovarock.cl. @leomeyer
Si eres de los que creen que escogimos el camino de la independencia para evitar horarios y jefes, estás muy equivocado. Ser emprendedor es justamente lo contrario: somos los primeros en llegar y los últimos en salir, sacrificamos más de un fin de semana al mes por trabajo y pasamos varias noches en vela haciendo propuestas.
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Recién cuando los temas comerciales se dan, la venta agarra vuelo y formamos un equipo de trabajo y podemos ordenar mejor la vida laboral, pero mientras eso no ocurra, transpiramos sangre para alcanzar las metas que van dando vida a nuestro sueño.
Nos sacamos la cresta para lograr cada cosa y nadie nos consuela cuando esas cosas no resultan. Algunos culpan al empedrado, pero cada vez somos más los que sabemos que este es un camino que se hace al andar, que los golpes enseñan y que la culpa no soluciona nada.
No estamos jugando a hacer empresa. Esto lo hacemos bien en serio.
Es cierto que nos motivan pasiones que van más allá de lo material pero eso no significa que no queramos el auto, la casa y las vacaciones. Igual que tú queremos armar familia, educar a nuestros hijos y devolverle la mano a nuestros viejos.
Por sobre todo somos corajudos. Arriesgados. Jugados. Comprometidos. No nos sentimos superiores pero tampoco nos gusta que nos tilden de pequeños ni medianos. Aportamos al país tal cual como lo haces tú. Y a veces más.
Somos una manada. Creemos sagradamente en la colaboración y no intentamos fingir ser algo que no somos: la autenticidad es un sello indeleble propio de sentirnos orgullosos de ser un emprendedor de tomo y lomo.
Mientras algunos reciben sueldo, nosotros los pagamos. Y mientras algunos reciben utilidades, nosotros seguimos invirtiendo capital propio. A muchos nos va bien y a otros nos va derechamente mal, pero cuando nos juntamos a conversar estamos felices de habernos dado la oportunidad de perseguir nuestros sueños. Nos atrevimos.
Así que más respeto cuando alguien te diga que armó su empresa o que es emprendedor. Hoy puedes estar al otro lado del escritorio… Pero eso es hoy. ¿Entendiste? Y si eres un emprendedor que no se respeta como tal no tenemos nada que hablar. Los de verdad tenemos las rayas del tigre en la mirada, humildad en el alma y decisión en las manos.
Así somos los emprendedores.
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