* Periodista especializado en cine, programador de Sanfic y comentarista en Radio Cooperativa.
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Muy potente está la cartelera de esta semana, partiendo por uno de los estrenos chilenos más esperados del año: «Ema», lo nuevo de Pablo Larraín, que desde su debut en la competencia del Festival de Venecia ha dividido a la crítica. Sensorial y sorprendente, con algunas interpretaciones muy logradas, una atractiva visualidad en la fotografía y el uso del baile y las locaciones de Valparaíso, y una notable banda sonora de Nicolás Jaar, es un proyecto arriesgado y difícil de clasificar y asimilar. Tiene muchas cosas que decir y mostrar, aborda diversos temas, y aunque no todo funciona tan bien -en especial su guion y el rumbo que va tomando la historia-, de verdad no deja a nadie indiferente.
A su vez, con una carrera irregular, pero fascinante, François Ozon es uno de los directores más destacados del cine francés de las últimas dos décadas, y ahora lo tenemos de regreso con «Por gracia de Dios», por la cual recibió el Gran Premio del Jurado en el Festival de Berlín. Inspirado en hechos reales y filmando de manera convencional y clásica, Ozon toca un tema tan delicado y vigente como los abusos sexuales en la iglesia católica; abordando los hechos de manera inteligente y sensible, con excelentes actuaciones y un hábil guion capaz de tomar en cuenta todas las aristas y ramificaciones de este tipo de temas, Ozon consigue eludir el sensacionalismo y los clichés y entrega uno de sus largometrajes más logrados y apasionantes. Y al mismo tiempo, nos permite establecer ineludibles paralelos con este tipo de situaciones en Chile.
Y con sólo seis películas en un cuarto de siglo, James Gray ha conformado una de las filmografías más estimulantes del cine estadounidense reciente, con títulos tan logrados como «Los dueños de la noche», «Los amantes» y «La inmigrante». Por eso había muchas expectativas con su «Ad Astra», que al igual que «Ema» también se estrenó en la competencia de Venecia. Aunque ha sido muy elogiada por los críticos internacionales, esta primera incursión de Gray en las películas espaciales que han estado de moda en los últimos años probablemente no cautivará de la misma manera a todos los espectadores, en especial por su muy particular ritmo, su frialdad y cómo desarrolla su historia; con una sólida e introvertida interpretación protagónica de Brad Pitt, destaca por su diseño de producción y efectos especiales, pero no llega a la misma altura del anterior filme del director, la bella «Z: La ciudad perdida», con la que tiene varios puntos en común.
«Zurita, verás no ver»
Exhibido en las competencias de festivales como Valdivia y Fidocs, este estreno del programa Miradoc es el más reciente documental de la realizadora chilena Alejandra Carmona Canobbio. Como acercamiento a la vida y obra del escritor Raúl Zurita es un retrato humano, conmovedor y no complaciente de su faceta pública y privada; un trabajo interesante, valioso y de bella factura visual y sonora, y de paso, una mirada a un período complejo en el Chile reciente, cuyos ecos siguen tremendamente vigentes.
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