En la sala de espera de este hospital, aguarda la familia de Tovi. La preocupación los invade. Minutos después, la doctora que atiende esta emergencia sale a darles el diagnóstico.
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El pronóstico no es muy alentador. La mascota de la familia García tendrá que ser operada de la cadera y la mandíbula, pues hace apenas unos días este canino intentó volar desde un séptimo piso.
Este es sólo uno de los 150 casos que diariamente recibe el Hospital Veterinario de la Ciudad de México, ubicado en la delegación Iztapalapa, una de las demarcaciones que concentran el 10 por ciento de perros abandonados, junto con Milpa Alta, Gustavo A. Madero y Xochimilco.
De acuerdo con Silvia Viruega, directora del hospital, las consultas más frecuentes son por descuidos, tales como atropellamientos, traumatismos o caídas de azoteas.
A pesar de que los costos en este hospital son hasta un 40 por ciento más bajos que los de cualquier veterinario privado, para la familia de Tovi representa un esfuerzo económico; sin embargo, están dispuestas a hacerlo con tal de tenerlo de vuelta en casa.
Con imágenes e información de Landybel Pérez, Uno TV.