Paris Jackson pasó la infancia en el anonimato. Esto gracias al deseo de Michael Jackson, de darle una vida tranquila a sus hijos. En 2013, la única hija del «Rey del pop» fue hospitalizada de emergencia. La adolescente se cortó los brazos e intoxicó con 20 pastillas de ibuprofeno. Tres años después de aquel indicente, Jackson parecía una chica feliz, hasta que publicó un video en el que denuncia el bullying que sufre en las redes sociales. “No entiendo por qué soy un objetivo tan fácil. Yo trato de ser simpática con todo el mundo que conozco. Le doy una oportunidad a todos. Usualmente soy una persona confiada. Trato de ser abierta con ustedes sobre lo que hago a diario. Comparto mi vida con ustedes. No escondo demasiado. Soy bastante pública”, dijo a la cámara. @FaniCerzam
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