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Adiciones a la cocaína, marihuana y pastillas para dormir, junto con una profunda depresión y rumores sobre el Sida fueron parte del historial médico de George Michael, quien falleció, según reportan medios ingleses, de un ataque cardiaco este 25 de diciembre en su casa en Gornign, Inglaterra. Con 53 años, la voz de «Faith» murió tan solo 18 meses después de que pasará tiempo en la clínica más cara y hermética del mundo. Así lo reportó el diario inglés Daily Mail, medio que reveló los últimos meses del cantante.
Su primera batalla médica comenzó en 1993 y se profundizó en 1997, cuando vio partir a su pareja Anselmo Feleppa producto de una enfermedad relacionada con el Sida y la muerte de su madre, respectivamente. «Me sentí como maldecido», declaró. Ambos hechos lo llevaron a una profunda depresión.
Casi diez años después, George Michael fue arrestado por posesión de narcóticos. El 2010 fue detenido tras chocar su Range Rover bajo la influencia de las drogas, por lo que tuvo que entrar a rehabilitación por 14 días, para luego explicar que era adicto a las pastillas para dormir. Un año después, el cantante admitió el uso de cocaína.
Su episodio más dramático ocurrió en 2011, cuando fue hospitalizado por una neumonía en Viena, hecho que inició con las especulaciones sobre si el cantante padecía Sida; rumores a los que el vocero del cantante tuvo que salir al paso confirmando la neumonía «y que cualquier otras especulación es infundada y falsa».
El 2015, tras ausentarse al matrimonio de su amiga y ex Spice Girls, Geri Halliwell, la especulación de su adicción a la marihuana fue en aumento.
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Fue ese mismo año en que Georgios Kyriacos Panayiotou, habría comenzado a tratarse en la Kusnacht Practice, clínica que cobra 70 mil libras esterlinas por semana, lo que la convierte en la más cara del mundo en tratamientos contra la adicción y otros problemas psiquiátricos. Un instalación que mantiene en total hermetismo la privacidad, tanto que nunca han hablado con los medios sobre el trabajo que realizan.
Michael adquirió un departamento, un mayordomo, una persona para el aseo y un chofer quien lo llevaba a cualquier lugar en su limosina Mercedes en Zurich. La clínica nunca confirmó o negó la estadía del artista, pero una fuente le aseguró al Daily Mail que «él había ido a Suiza porque quería dejar un hábito con las drogas». Durante su estadía, el cantante era llevado en el auto antes mencionado a sus terapias. A diferencias de otras clínicas, esta no trataba a sus pacientes como reclusos, por lo que el ex Wham! iba a y venía del lugar.
El diario británico afirmó que no es posible dejar en claro si el tratamiento recibido por Michael en la Kusnacht Practice tuvo efecto o no.
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