Los diputados socialistas Juan Luis Castro y Patricio Rosas – miembros de la Comisión de Salud de la Cámara Alta – valoraron la aprobación en Sala del proyecto que establece la obligatoriedad de contar con equipos desfibriladores en espacios de eventos masivos públicos y que permite auxiliar a quienes sufran infartos de manera imprevista y en menor tiempo.
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El diputado Castro, dijo que “la Cámara de Diputados ha aprobado el proyecto que va a establecer como obligatorio que en todos los recintos públicos, estadios, establecimientos educacionales públicos y privados, eventos musicales, metros, supermercados, moteles, edificios públicos, haya un desfibrilador automático”.
El legislador PS, explicó que “más del cuarenta por ciento de las personas que caen en un colapso en cualquier lugar lo hacen producto de un paro cardíaco en fibrilación ventricular o en una arritmia ventricular grave, que les lleva la vida y que pueden fallecer si no son rescatadas a tiempo”.
El parlamentario por la Región de O’Higgins, expresó que “llamar al SAMU o a un paramédico demora minutos de oro, por eso es que hoy en el mundo está accequible este equipo que implica salvarle la vida por cualquier persona, no necesariamente por personal paramédico, en la medida que esté capacitado para tener un rescate inmediato de alguien que puede morir producto de un infarto, como ocurre en Chile donde la primera causa de muerte es la cardiovascular”.
“Quiero recordar que hoy estos instrumentales están en manos del SAMU, de Bomberos, pero llamar a cualquiera de ellos demora por lo menos 15 minutos; y solo algunas instituciones privadas tienen este equipo de muto propio. Esto va tener un instructivo que partiremos haciéndolo en la Cámara de Diputados en los próximos días de manera oficial”, aseveró Castro.
El diputado Rosas, en tanto, agregó que “esta aprobación de la norma es muy importante, porque recoge la experiencia internacional en que cerca del 10 por ciento de los paros cardíacos ocurre en la vía pública y cerca del veinte por ciento en recintos públicos. Tenemos un universo de un 30 por ciento, en que sufren una caída por un paro cardíaco a pesar de tener actividad eléctrica, no es efectiva, como es el caso de la taquicardia ventricular, que es una patología que si se actúa en los primeros minutos puede recuperar la función cardíaca”.
El parlamentario (PS) por la Región de los Ríos, aseveró que “esto, en otros países, con educación, se ha logrado la recuperación del 60 por ciento de los casos de personas que han sufrido paros cardiacos, siendo esto último, la principal causa de muerte. Por ende, contar con un desfibrilador es una herramienta, donde si bien, la aplicación de esto va a ser lenta, tenemos la certeza que será un instrumento en que tendremos mayor seguridad para nuestra población”.
