Entre los factores que han motivado esta decisión, Domínguez citó las condiciones de seguridad, las conexiones del aeropuertos de Madrid-Barajas con América Latina y la «gran tradición futbolística» de la capital española.
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El partido de ida, que se jugó en el estadio del Boca Juniors, la Bombonera, el 11 de noviembre, terminó con un empate a 2.
El 24 de noviembre, unas horas antes del comienzo del partido de vuelta, el autobús del Boca Juniors fue atacado con piedras y botellas vacías por los hinchas del River Plate en las cercanías del estadio Monumental, lo que provocó graves daños materiales en el vehículo y lesiones de diversa índole a varios jugadores del equipo visitante.
El incidente provocó el aplazamiento del partido para el día siguiente, antes de ser definitivamente pospuesto tras las solicitudes oficiales del Boca Juniors pidiendo que el River Plate fuera descalificado y que se les entregase el trofeo directamente, sin jugar la segunda vuelta de la final. Video: Ruptly.