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La apuesta nacional en los Oscar, «Historia de un oso», otorgó a Chile el primer premio de la Academia en la entrega de premios que se realizó esta noche en la ciudad de Los Angeles, Estados Unidos.
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El cortometraje animado nacional se impuso en una dura competencia a filmes de grandes productoras de la talla de Pixar, gracias a una trama que no dejó a nadie indiferente.
Realizado por el director Gabriel Osorio y el productor Patricio Escala, el corto conquistó a la Academia con su conmovedora historia sobre un melancólico oso que a través de un organillo con un teatro de títeres rememora los días felices junto a su familia antes de que se lo llevara lejos un circo.
Sin diálogos, las imágenes y la música instrumental que las acompañan hablan por sí solas, y es imposible no emocionarse. La trama se inspira en lo vivido por el abuelo de Osorio durante la dictadura militar, cuando fue detenido y posteriormente exiliado a Inglaterra, debiendo alejarse de su familia.
En el escenario del teatro Dolby de Hollywood, Osorio señaó que «quiero dedicar este premio a mi abuelo y a toda la gente que ha sufrido en el exilio». Escala, por su parte, destacó que «venimos de Chile, es el primer Oscar para nuestro país. Esto es muy importante para todos. ¡Viva Chile!»
Desde su debut en los festivales internacionales, «Historia de un Oso» recibió una importante cantidad de premios que pavimentaron su nominación al Oscar como el único representante nacional en esta versión.
Ad portas de la ceremonia, medios especializados lo destacaban como favoritos y, afortunadamente para nuestro país y para ellos como realizadores, las apuestas fueron acertadas y hoy todo Chile celebra el triunfo de Osorio, Escala y su equipo de Punkrobot Estudio.
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