Cuatro dólares. Eso fue lo que determinó la justicia como indemnización para una familia de Florida luego de que Gregory Hill Jr. muriera tras recibir dos balazos en el abdomen y uno en la cabeza por parte de un policía.
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Los hechos se remontan al 14 de enero de 2014, cuando una vecina realizó una denuncia por ruidos molestos en la casa del hombre de 30 años.
Cuando el agente Christopher Newman junto a otro uniformado llegaron al lugar, golpearon la puerta del garaje. Gregory la abrió y luego la cerró. El policía dijo que vio que el hombre portaba un arma en una de sus manos por lo que disparó en cuatro ocasiones, dándole dos veces en el abdomen y una en la cabeza, lesiones que le causaron la muerte.
Tras ello, y sin recibir alguna respuesta desde dentro de la vivienda, los policías pidieron refuerzos, llegó un equipo SWAT y dispararon gas lacrimógemno contra la casa causando serios daños.
Viola Bryant, la madre de Gregory Hill Jr., presentó una demanda contra Newman y el sheriff Ken Mascara por “homicidio culposo, negligencia, exceso de fuerza y violación de derechos”, indica CNN.
las pruebas presentadas en el juicio demostraron que Gregory si tenía un arma, pero esta estaba en uno de sus bolsillos, que nunca la tuvo en la mano y ni siquiera la sacó, ya que no quedaron manchas de sangre tras el tiroteo y además estaba descargada.
Hace unos días, tras un largo juicio y 10 horas de deliberación, un jurado determinó que el uniformado no era culpable del homicidio y que el sheriff era responsable sólo del 1% de la muerte y que Gregory “era responsable de su propia muerte en un 99%”.
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Debido a ello, el juez decidió indemnizar a Viola Bryant con un dólar y otros tres por cada uno de los hijos de Gregory por la pérdida de su padre.
Y además, como el sheriff sólo era responsable del 1%, se le “condenó a pagar” apenas 4 centavos de dólar.
El abogado de la familia calificó el fallo como «desconcertante» y lamentó que «el dolor de un niño negro sólo valga un dólar».
«Esto dice que las vidas negras no importan», apuntó, antes de asegurar que van a apelar a la sentencia.
