No hay nada más desagradable que ir en el Metro y sentir el mal olor de algunas personas que son alérgicas al agua, a los perfumes, los desodorantes o a cualquier cosa que signifique asearse.
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Esto se acrecienta en el verano, algo que están viviendo los habitantes de Viena, especialmente ahora que las altas temperaturas se están sintiendo con fuerza en Europa.
Por lo mismo, la empresa responsable del transporte urbano en la capital de Austria tomó una interesante y agradecida decisión para luchar contra los malos olores en los vagones: Wiener Linien repartió 14 mil desodorantes entre los pasajeros de la U6, los cuales se agotaron en un día.
Según informa El País, la medida se efectuó en una de las líneas con peor climatización del Metro, en donde solamente la mitad de los trenes tienen aire acondicionado.
El portavoz de la compañía Daniel Amman salió a explicar la acción, aunque de paso quiso salvar el honor de los austriacos. «Esto no quiere decir que los pasajeros vieneses huelan peor que los de otros sitios», resaltó.
En ese sentido, detalló que todo se debe a una campaña para concientizar a las personas sobre «los malos olores». Por lo mismo, los desodorantes no serán la última medida, sino que también se prohibirán en unos días más que las personas consuman alimentos que sean más fuertes, como por ejemplo las pizzas.
«A muchos pasajeros del metro les incomodan los fuertes olores», remató Amman.