El suicidio de Bradley John, un adolescente inglés de 14 años víctima de bullying, ha conmocionado no sólo a la comunidad de su colegio en South Walles, sino también a todo el país por su drástica decisión.
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Su historia ha generado un fuerte debate acerca del maltrato escolar, especialmente luego que su padre, Byron John, revelara nuevos y dramáticos detalles de su muerte.
En entrevista con un programa de televisión, John detalló que luego que su hijo escapara de una de sus clases y estuviera desaparecido por cerca de una hora, pidió a su hermana menor Danielle que lo buscara.
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La niña de 12 años, comenzó a preguntar si lo habían visto sin obtener respuestas positivas. La joven decidió llamarlo para ver si escuchaba el sonido de su teléfono y así fue como dio con él, aunque ya era demasiado tarde, Bradley se había suicidado colgándose al interior de uno de los baños de su colegio.
«Lo peor de todo fue que oyó su teléfono al otro lado de la puerta cuando su teléfono estaba en su bolso», dijo el padre en la entrevista que reproduce el Daily Mail.
Minutos de terror
Tras escuchar el sonido del celular, la joven trató de entrar al baño sin resultados, por lo que pidió ayuda al personal del colegio, explicó el padre.
Pese a que los paramédicos hicieron de todo para salvar al joven no lo lograron, contó John, detallando que tras la conmoción los funcionarios de salud determinaron que su hijo habría estado colgado en ese lugar por al menos una hora.
Bradley estaba en tratamiento por su déficit atencional dese los seis años, sin embargo su condición lo transformaba en un blanco para los abusadores, contó la familia.
En su entrevista el padre cuestionó la política anti bullying del establecimiento educacional al que asistía su hijo y aunque dijo que pensaba tomar acciones contra el colegio, por ahora está concentrado en cuidar la salud mental de su hija, que debió enfrentar la muerte de su hermano de una manera tan dura.