El dolor era fuerte y constante, sin embargo soportó durante 40 días dicho calvario antes de ir al médico.
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La mujer de 57 años decidió recurrir a los doctores cuando ya no aguantaba y el dolor de estómago era insoportable.
Según Daily Mail, de inmediato los doctores le realizaron una endoscopia y se encontraron con una desagradable sorpresa en el intestino delgado.
La mujer tenía un mondadientes de siete centímetros incrustado en el duodeno.
“No tengo idea cómo llegó ahí, no recuerdo habérmelo tragado”, dijo la angustiada mujer.
Los doctores lograron extraerle el mondadientes y la mujer se recupera sin complicaciones.
