Un hombre de 36 años falleció debido a una insuficiencia cardíaca apenas una semana después de haber tosido parte de uno de sus pulmones.
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La publicación del New England Journal of Medicine indica que el sujeto, que no fue identificado, se estaba tratando en el Centro Médico de la Universidad de California en San Francisco. Además, le habían puesto previamente un marcapasos.
El hombre ingresó a cuidados intensivos del hospital debido al agravamiento de sus problemas, le colocaron “un dispositivo de asistencia ventricular” y se le comenzó a inyectar heparina.
La publicación agrega que el paciente sufrió hemoptisis, expectoración de sangre proveniente de los pulmones, y “aumento de la dificultad respiratoria”, por lo que tuvo que aumentar el uso de oxígeno.
Tras ello, y “durante un ataque extremo de tos”, el hombre expectoró espontáneamente un “molde intacto del árbol bronquial derecho”, un coágulo formado en el tronco bronquial.
El hombre tuvo que ser intubado, luego de dos días se terminó con el procedimiento y dejó de expectorar sangre, pero lamentablemente “una semana después de la extubación murió por complicaciones de insuficiencia cardíaca”, finaliza.
