Un nuevo hecho ocasionado por el cambio climático a nivel mundial fue descubierto por científicos australianos, teniendo como protagonistas a los tiburones.
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Según el estudio publicado en la revista Symmetry, el calentamiento de la temperatura del océano está haciendo que esta especie cambie completamente su forma de nadar, convirtiéndose en diestros.
Los expertos incubaron huevos en tanques calentados para simular los cambios de temperatura a finales de siglo, encontrando muertos a la mitad de los tiburones al primer mes, mientras que los restantes prefirieron comenzar a nadar hacia la derecha, en un movimiento conocido como «lateralización».
«Incubamos y criamos tiburones de Port Jackson a las temperaturas actuales y proyectadas de fin de siglo y medimos las respuestas de desvío preferenciales hacia la izquierda o hacia la derecha», sostuvieron los investigadores.
Para probar este punto, colocaron un tanque largo en el fondo del mar en forma de Y, poniendo alimentos en cada uno de los dos puntos de la zona superior, para ver hacia que lado preferían ir.
«Los tiburones incubados a temperatura elevada mostraron una lateralidad absoluta más fuerte y estaban significativamente inclinados hacia la derecha en relación con los tiburones criados a la temperatura actual», señalaron los expertos.
De esta manera, los científicos concluyeron que el cambio climático está generando un efecto mucho mayor y más rápido en los cerebros de las especies marítimas.
«Dado que la lateralidad es una expresión de asimetrías funcionales del cerebro, los cambios en la fuerza y la dirección de la lateralización sugieren que el calentamiento rápido del clima podría afectar el desarrollo y la función del cerebro», afirmaron.
