Luego de una larga investigación y tras de más de un año de los terribles hechos, la policía de Virginia decidió no levantar cargos contra un menor de 13 años que provocó la muerte de una joven de 22 al intentar suicidarse.
PUBLICIDAD
En octubre del año pasado, Marisa Harris había salido de paseo con su novio Perry Muth al lago Burke y regresaban a su casa por la interestatal 66, señala The Washington Post.
La joven conducía el vehículo mientras su pololo iba descansando en el asiento del copiloto cuando se desató la tragedia.
Recomendado
“La ropa que no me quiso devolver se la puso la polola nueva”: Kel Calderón reveló insólita acción...
Pablo Herrera califica a venezolanos que emigran de “cobardes” y compara a delincuentes extranjeros con los chilenos: “Han...
Helhue Sukni denuncia estafa tras arrendar departamento por aplicación: “Encuentro insólito”
El menor saltó desde el paso sobre nivel en un lugar que no había ni una barrera que impidiera que el niño se trepara en el lugar y cayó sobre el vehículo impactando de lleno en el lado del conductor.
El golpe hizo que gran parte del techo del auto colapsara y que se rompiera la parte superior del volante.
Perry despertó de inmediato e intento sacar el cuerpo del niño y frenar el vehículo, pero al no lograrlo decidió tomar el volante y llevarlo derecho contra una pared donde se estrelló.
Sacó al menor, estaba ensangrentado y con una fractura expuesta, y trató de reanimar a su novia Marisa antes de que llegaran los servicios de urgencia.
De ahí en más fue trasladado hasta el hospital y luego de una hora y media y tras de un arranque de ira para que le informaron lo que estaba pasando con su polola, le comunicaron que había muerto.
Poco después escuchó a la madre de Marisa gritar cerca de la habitación en que estaba luego de que le comunicaran la terrible noticia.
La joven murió en el mismo lugar y los paramédicos no pudieron hacer nada por ayudarla.
La investigación, eso sí, siempre fue por el lado del intento de suicidio, sin embargo desde el colegio aseguraron que el niño no intentó quitarse la vida, que sólo jugaba en el lugar y perdió el equilibrio luego de que su teléfono móvil cayera a la carretera.