Jonathon Zicarelli llegó hasta una estación de policía de Greenwood al noroeste de Missouri para hacer una terrible confesión.
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El sujeto les dijo a los agentes que había ahogado en un estanque cercano a su hija de apenas 6 meses, señala Fox News.
Luego de establecer donde estaba el estanque, los uniformados salieron raudos hacia el lugar y cuando llegaron casi no podían creer lo que estaban viendo.
La bebé estaba con vida y flotando boca arriba. “Parecía una muñeca de porcelana”, dijo uno de los policías.
La pequeña tenía “hierba en la boca, barro en los ojos y agua en los pulmones” y además presentaba una severa hipotermia luego de permanecer por cerca de 10 minutos en el agua, por lo que rápidamente fue trasladada a un hospital donde se recupera de buena forma.
El sujeto de 28 años reconoció que había planeado el homicidio de su hija por más de 24 horas y que había ido tres veces al estanque para verificar que sí podría ahogarla.
Cuando se decidió a cometer el brutal acto, tomó a la pequeña, la “depositó” sobre el agua y vio como se hundía.
Zicarelli quedó detenido y quedó con una fianza de 500 mil dólares.
