Alexandra Black había comenzado a trabajar en el Centro de Conservadores en Burlington hace sólo dos semanas luego de graduarse de Universidad Estatal de Indiana y este era su primer empleo tras dicho logro.
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La joven de 22 años estaba “siguiendo su pasión” y lucía absolutamente feliz con su trabajo, sin embargo lo que parecía un sueño terminó en tragedia.
Ayer, un equipo encabezado por un “cuidador de animales profesionalmente entrenado”, según el Centro de Conservadores, estaba realizando una limpieza de rutina en una jaula, y por causas que se investigan, uno de los leones dejó el espacio cerrado en el que lo habían puesto.
El animal se encontró con otros trabajadores, atacó y mató a Alexandra. El personal reaccionó lo más rápido que pudo y mató a tiros al león, pero cuando asistieron a la joven ya era demasiado tarde.
El refugio agregó que la investigación está en curso, que no entregará más antecedentes por el momento y que el centro permanecerá cerrado.
La familia de Alexandra señaló a CNN que la joven había muerto “siguiendo su pasión” y que esta era la cuarta pasantía que realizaba en organizaciones de este tipo porque quería seguir una carrera junto a los animales.
“Era una joven hermosa que acababa de comenzar su carrera, hubo un terrible accidente y estamos de luto”, apuntaron.