Trabajos asquerosos existen y hay muchos. Sin embargo, cuando limpiar traseros no es parte de tus labores, todo se puede tornar bastante denigrante.
PUBLICIDAD
Así le ocurrió a una azafata de la aerolínea taiwanesa EVA AIR. Esto pues, según su testimonio, debió ayudar a un pasajero con evidente sobrepeso a hacer sus necesidades. Para rematar la situación, el hombre – en silla de ruedas -pidió que lo desnudaran y gemía de placer.
La anormal petición ocurrió en un vuelo desde Los Ángeles a Taipéi, el pasado 18 de enero.
Críticas a la aerolínea
La denuncia fue emitida ante la prensa. La trabajadora, sin miedo, apareció acompañada por miembros del sindicato de la aerolínea. En el lugar contó la verdad de lo ocurrido.
El sujeto, un estadounidense de unos 200 kg, exigió a tres auxiliares que lo desnudaran. Todo esto con el fin de sentarlo en el WC, razón por la que sólo le sacaron los pantalones.
“Sentí que, como asistente, quitarle la ropa interior a un pasajero estaba fuera del alcance de mis responsabilidades”, expresó la mujer que prefirió no identificarse.
El tema es que esta aerolínea no cuenta con auxiliares masculinos. De haber sido así, el reclamo de la trabajadora no habría ocurrido.
PUBLICIDAD
Así las cosas, tres mujeres desvistieron a este inusual pasajero. Tal fue la incomodidad que intentaron cubrir sus genitales mientras le sacaban los calzoncillos.
Según relató la azafata, la primera insinuación del estadounidense fue sacarse la manta con un manotazo. A su vez pidió que le dejaran la puerta del baño abierta, pues si no “no podría respirar”.
Al terminar de defecar, el hombre pidió que le limpiaran el trasero. Las mujeres se negaron, pero el hombre estaba haciendo “taco”, ya que a esas alturas había fila para entrar al baño. Finalmente la jefa de cabina aceptó realizar la denigrante tarea.
“Oh, hmmm, más profundo, más profundo”, habría comenzado a decir el sujeto. Y, peor aún, luego se quejó de que no lo limpiaron adecuadamente y pidió que repitieran la acción.
Para el Sindicato de Asistentes de Vuelo de Taoyuán, la situación “constituye claramente un caso de acoso sexual”. Bajo este contexto pidió a la aerolínea que interpusiera una demanda en contra del hombre.
No obstante, tras la rueda de prensa la empresa emitió un comunicado. En su interior afirmaban que la tripulación tiene todo el derecho a rechazar este tipo de peticiones.
De todas formas mostraron disposición en apoyar a la auxiliar en su demanda contra el pasajero de 200 kg.
Trascendió que en 2018 este mismo sujeto defecó en sus pantalones en pleno vuelo.