Una banda de delincuentes cayó luego de cometer más de 20 robos en los que utilizaban extrañas técnicas para que todo saliera a la perfección.
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Los sujetos utilizaban el método del butrón, el que consiste en realizar un agujero en la pared más vulnerable del local que se pretende robar.
Según El Mundo, uno de los líderes de la banda, que cometía principalmente los delitos en Barcelona, “fue identificado en la calle haciendo espectáculos de contorsionismo”, lo que le servía para cometer los delitos, ya que los agujeros no eran muy grandes y esa capacidad la utilizaba para escabullirse en los locales y luego dejaba ingresar a sus “socios”.
Además, para que nada quedara al azar, los sujetos consultaban el horóscopo para “determinar” el mejor día para dar los golpes.
En una de las viviendas de los acusados se encontraron varios elementos que habían sido reportados como robados, además de diarios que detallaban paso a paso la planificación previa a los robos.
En ello encontraron planos de los lugares, las “rutinas de los propietarios” de los locales asaltados e incluso bosquejos sobre las posiciones que asumían cada uno de los miembros de la banda.