Efren Mencia-Ramírez manejaba por la carretera interestatal 85 en el condado de Spartanburg en Carolina del Sur cuando a lo lejos vio las luces de una patrulla.
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El sujeto inmediatamente se puso algo nervioso, ya que iba bebiendo en su automóvil y estaba más que claro que no lograría pasar la prueba de sobriedad.
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Sin embargo, el sujeto tuvo una “gran idea” para engañar a los oficiales y poder salir sin mayores problemas del control.
Cuando se detuvo, el hombre tomó un desodorante en spray que tenía a mano y lo roció por varios segundos en su boca para que así los uniformados no notaran el olor a alcohol, señala The State.
El policía que se acercó vio como el Mencia-Ramírez se llenaba la boca con el spray antes de proceder a preguntarle por qué lo estaban deteniendo.
Según el informe, al interior del vehículo había 12 cervezas, 10 de ellas estaban casi vacías y una la tenía entre las piernas a medio tomar.
Los agentes señalaron que el hombre “olía a alcohol y mostraba signos de intoxicación”. Los resultados de la alcoholemia arrojaron que Mencia-Ramírez manejaba con el doble del límite permitido en Carolina del Sur.
Terminó detenido y acusado de varios cargos.