“Es importante recordar que si un conductor ebrio mata a una mujer embarazada, se le castiga dos veces. Si asesinas a una mujer embarazada, te castigan dos veces”.
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Esa es parte de la argumentación del representante del Partido Republicano en Texas Tony Tinderholt para justificar el proyecto de ley busca penalizar el aborto sin excepción.
La iniciativa catalogaría al aborto como un homicidio, por lo que podría terminar con mujeres condenadas a pena de muerte, indica Fox 5 DC.
Tinderholt presentó el proyecto por primera vez en 2017, pero ahora está a pasos de que sea visto en toda la Cámara.
Es para que las mujeres sean “más responsables”, apuntó el representante, que agregó que “su intención es garantizar la ‘protección igualitaria’ para la vida dentro y fuera del útero”, señala The Washington Post.
“No estoy criminalizando específicamente a las mujeres, lo que estoy haciendo es igualar la ley”, finalizó.
En la audiencia, cientos de personas entregaron sus argumentos ante el Comité de Jurisprudencia y Jurisprudencia Civil y fue la primera vez en el estado que se escucharon testimonios públicos.
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Sonya Gonnella, una de las mujeres que expuso y que se identifica como “seguidora del señor Jesucristo”, le pidió a los legisladores que “se arrepintieran junto a ellos”, mientras otros hablaron de “genocidio” e incluso señalaron que una ley de este tipo prevendría “la ira de Dios” y que si no la aprobaban tendrían que rendir cuentas ante el “creador”.
En total fueron 446 personas las que intervinieron en la sala a favor de la medida, principalmente miembros de grupos religiosos, mientras que 54, entre “activistas de los derechos de las mujeres y expertos legales”, expusieron en contra del proyecto.