Social

Asteroide de 60 metros arrasa con Nueva York y la destruye por completo: simulacro de la NASA revela el cataclismo tras caída de enorme bola de fuego

La prueba fue efectuada durante el marco de la Conferencia de Defensa Planetaria 2019.

Estamos a 29 de abril del 2027 y observamos atónitos como un asteroide, viajando a una velocidad de 19 kilómetros por segundo, impacta a Nueva York.

La Gran Manzana, considerada por muchos como la capital del mundo, se ve destruida por una enorme bola de fuego de 100 a 130 metros, la cual había sido descubierta ocho años atrás pero que pese a todos los esfuerzos de los expertos, no lograron derribarla o desviarla de su recorrido.

El impacto del asteroide es tan devastador, siendo la explosión de unos 15 megatones mil veces superior a la bomba caída sobre Hiroshima en Japón, ocurrida en 1945.

Todo esto es parte del simulacro realizando en el marco de la Conferencia de Defensa Planetaria 2019 que se realizó en Washington, siendo ideada por diversas agencias internacionales.

¿Cómo fue el ejercicio?

Todo se inició, acorde a la ficción, el pasado 26 de marzo cuando expertos descubren un NEO (objeto cercano a la Tierra), que puede ser potencialmente peligroso para nuestro planeta.

Tras este hallazgo, se prevé que hay un 1% de chances que el asteroide nos impacte. Sin embargo con el correr de los meses, esta probabilidad va aumentando hasta llegar al 100%, identificándose durante fines del 2021 el epicentro en donde golpearía este cuerpo rocoso: Denver.

Por lo mismo ese año la NASA envía una sonda para investigar de forma más cercana esta amenaza, mientras que las potencias mundiales construyen unas especies de seis «busques impactadores» que tienen como propósito impactar a la bola de fuego para que ésta se desvíe de su destino.

Y tienen un éxito parcial ya que tres de estos objetos logran golpear al asteroide. Sin embargo una pieza de 60 metros, que se desprendió del cuerpo rocoso completo, continúa su tránsito hacia nuestro planeta.

¿Qué pasó?

Ante la emergencia, y usando como ejemplo una táctica realizada por Japón un año antes cuando un NEO iba con dirección a Tokio, Estados Unidos decide enviar una misión final que cuenta con una carga nuclear para poner fin a la amenaza. Lo malo es que las discusiones políticas terminan frenando la estrategia, no quedando ninguna opción más que esperar el impacto.

A falta de seis meses para que ocurra la tragedia, los expertos determinan que la bola de fuego caerá en Central Park en Nueva York y que la ciudad quedará destruida por completo, especialmente la zona de Manhattan.

Y justamente todo esto acontece, generando un verdadero cataclismo económico y humano en todo el mundo.

 

¿Un llamado a la calma?

Pese a lo apocalíptico que suena todo el simulacro,  el creador del escenario y director del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena Paul Chodas afirmó que en caso de ocurrir algo de estas características, lo más probable es que el asteroide caiga sobre alguno de los océanos.

«Necesitamos desafiarnos a nosotros mismos y hacer las preguntas difíciles. No aprendes nada si no estudias el peor caso posible cada día», expresó.

«Cada día preguntamos, ¿y si?», afirmó el experto, recalcando que el simulacro trata de demostrar qué pasaría en el escenario más terrible, por lo que resaltó que ninguno de los participantes de la conferencia cree que ante una emergencia real de este tipo los hechos ocurran de la misma forma que acontece en el simulacro.

Tags

Lo Último


Te recomendamos