Una encargada de un local de Dunkin’ Donuts terminó en la cárcel luego de contratar una “empleada fantasma” para solucionar sus problemas económicos.
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Markia Nelson era la gerente en una tienda ubicada en el condado de Pinellas, Florida, y buscó una insólita e ilegal forma para sumar más dinero a su cuenta bancaria.
La mujer de 29 años contrató una “empleada ficticia” el pasado 15 de mayo y el 16 “comenzó a trabajar” en el local hasta el 6 de junio, señala KLFY.
Durante todo ese tiempo, la “empleada” registro un total de 235 horas trabajadas, con lo que ganó poco más de 1.600 dólares, dinero que fue prestamente depositado en la cuenta bancaria de Markia.
Luego de ser arrestada y acusada de hurto mayor, la mujer admitió el robo y les dijo a los policías que lo había hecho para solventar sus “gastos de la vida”.
