«Había mucha sangre en todas partes”. Esa fue la descripción de una pasajera de un vuelo de Air Canada que iba desde Vancouver a Sydney luego de una terrible turbulencia que provocó pánico y terror entre los ocupantes de la nave.
Cuando el Boeing 777 llevaba dos horas de vuelo y se encontraba a más de 10 mil metros de altura ocurrió el incidente que dejó 35 personas heridas.
Fue tal la violencia de las turbulencias “imprevistas y repentinas” que varios pasajeros salieran volando de sus asientos y se golpearon contra el “techo” del avión, apunta The Independent.
“De repente, el avión ‘cayó’ y se fue de lado. Y ahí fue cuando la gente que no estaba con cinturón voló”, dijo Andrew Szucs, que agregó que no alcanzó a realizarse ni una advertencia por parte de la tripulación.
Según Air Canada, el “vuelo AC33 se encontró una turbulencia repentina y no pronosticada“, lo que derivó que se realizara un aterrizaje de emergencia debido a los lesionados que quedaron tras el incidente.
Las personas resultaron con heridas y fueron “evaluadas, tratadas a hospitales y luego dadas de alta”, agregó la compañía, mientras esperan en hoteles retomar su viaje.