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Billy Oliver nunca pensó que ir a alojar a casa de uno de sus amigos terminaría convirtiéndose en una de las peores noches de su vida.
El niño de 11 años se acostó a dormir y cerca de las 2.30 de la mañana despertó con un terrible dolor luego de que su amigo le tirara agua hirviendo encima, apunta KFOR.
El menor que lanzó el agua caliente estaba realizando el ridículo reto del #HotWaterChallenge, que consiste en tirar o dejarse caer agua hirviendo o beberla a través de una bombilla.
Billy terminó con quemaduras de segundo y tercer grado, y además del dolor y las secuelas, tuvo que soportar que Angela Guth, la madre de su agresor, no lo llevara de inmediato a un centro asistencial.
La mujer de Kentucky terminó arrestada “por no buscar ayuda médica oportuna” y se le levantarán cargos por “abuso y poner en peligro la vida de un menor”, apunta El Diario NY.
“Hablen con sus hijos, por favor”, fue el sentido llamado de Patricia Oliver, la madre de Billy que mostró en las redes sociales cómo había quedado su hijo.
“La educación es lo único que podemos entregarles en este momento. Los padres necesitan hablar. Mi hijo se había quedado muchas noches con ese chico y nunca lo había puesto en peligro, pero es un desafío, ya sabes”, indicó.
