Melissa Martin y Denise Mintz llevaron a sus perritos, Abby, Izzy y Harpo a jugar al agua en un estanque en la ciudad estadounidense de Wilmington.
PUBLICIDAD
Allí los cachorros estaban felices buscando su pelota y rodando en el barro, haciendo las delicias de la pareja, quienes tomaron varias fotografías de sus regalones.
Sin embargo, a los minutos después los animales comenzaron a dar muestras de sentirse mal de forma misteriosa y a las horas fallecieron en un centro veterinario.
¿Qué pasó?
Los perritos empezaron a convulsionar y en el recinto asistencial evidenciaron signos de insuficiencia hepática.
Tras ser revisados por los veterinarios, determinaron que los canes «contrajeron intoxicación por algas tóxicas».
«Lo que comenzó como una noche divertida para ellos terminó en la mayor pérdida de nuestras vidas», escribió Melissa Martin en Facebook para dar a conocer el caso, en donde llamaron a otras personas que tengan cuidado con sus mascotas si desean llevarlas a nadar o jugar en estanques.