Una ex modelo de 47 años ha pasado por lo peor en su vida. Con el objetivo de perfeccionar su rostro y dejar atrás las huellas del envejecimiento, se sometió a un tratamiento de ácido hialurónico.
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Sin embargo, todo salió mal. En el caso de Carol Bryan no sólo sufrió deformaciones faciales sino también la pérdida absoluta de un ojo.
A los meses de hacer suministrado el ácido hialurónico en su rostro, la mujer comenzó a notar distorsiones provocadas por la hinchazón. Cuando la modelo visitó a los médicos, ellos se sorprendieron tras el terrible resultado.
Bryan entró en depresión y se volvió una recluta virtual. Avergonzada por su aspecto, no vio otra salida que el suicidio. Afortunadamente, no lo llevó a cabo y hoy en día es capaz de contar su historia.
Con el tiempo la mujer recuperó las ganas de vivir, sin embargo sigue pensando que será incapaz de encontrar una pareja: «Ni siquiera puedo imaginar que alguien tenga el deseo de ningún tipo de querer estar conmigo de esta manera», confesó.
“Tu cara es tu tarjeta de presentación: es lo que te hace capaz de salir y funcionar en el mundo y cuando ya no tienes cara es difícil saber cómo estás”, concluyó.