Una mujer de 36 años terminó en la cárcel luego de llamar a la policía debido a que sus padres le habían “cortado” el celular.
Según New York Daily News, Seloni Khetarpal llamó al 911 quejándose de que sus papás habían dejado de pagar el servicio.
En esa primera comunicación, se le comunicó que aquello no era una emergencia y que no volviera a llamar porque ese número sólo estaba reservado para urgencias reales.
La mujer no quedó contenta con la explicación y cerca de dos horas después volvió a comunicarse con el 911.
Desde el otro lado de la línea le señalaron que lo que estaba haciendo era “inaceptable”, sin embargo, Khetarpal les respondió que ella “creía que era un problema real”.
La policía llegó hasta la casa de la mujer en Ohio, la acusó de “interrumpir los servicios públicos”, un delito que se considera grave, por lo que terminó detenida y fue llevada a la cárcel del condado de Stark.
Khetarpal quedó en libertad tras el pago de una fianza de 2.500 dólares
Aún no está claro desde qué teléfono llamó para hacer su “denuncia”, ya que el de ella estaba sin servicio.
