Un hombre de 41 años que cumple cadena perpetua por un asesinato en 2009 en una cárcel de California, confesó que mató en la prisión a dos abusadores de menores en una carta que envió al periódico The Mercury News.
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Desde el medio le habían pedido una entrevista luego de la muerte de David Bobb de 48 años y de Graham De Luis-Conti de 62, los que también estaban presos de por vida por una “agresión sexual agravada” contra un menor de 14 años.
Jonathan Watson era sindicado como el responsable de ambos homicidios, pero desde el centro penitenciario no habían entregado muchos detalles, indicando que había una investigación en curso.
En la carta, el hombre de 41 años dice que habían bajado su “clasificación de seguridad” y que lo habían cambiado de una celda de una sola persona a una compartida, lo que calificó como un “error”, señala Crime Online.
Watson dijo que pusieron en su celda a un abusador de menores y que la noche anterior al ataque “no podía dormir» y sólo pensaba en «lo que todos mis instintos me decían que tenía que hacer”.
Dos horas antes de la golpiza, asegura que habló con un consejero y le dijo que tenía que ser trasladado antes de que matara a uno de “esos tipos”, pero que sólo había recibido burlas por parte del funcionario.
Cuando regresó, dice que su compañero estaba viendo un bloque infantil en un canal de TV y se burlaba de otros reclusos.
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Tras ello, dijo que otro preso se preguntó si “¿este tipo realmente iba a ver esto justo frente a nosotros?”, y que ahí decidió ir por bastón.
Dice que golpeó brutalmente a su compañero de celda y que tras ello fue a buscar a un guardia, pero se encontró con el otro abusador y que simplemente pensó “que le haría una favor a todos”, por lo que también lo atacó.
David Bobb murió una hora y media después del ataque, mientras que Graham De Luis-Conti falleció luego de tres días en un hospital al que había sido trasladado.
