Un joven de 23 años fue agredido por un grupo de personas en Oxford Street, en Londres, sólo por el hecho de tener rasgos asiáticos.
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Jonathan Mok escribió una sentida declaración en Facebook acompañada de dos fotos tratando de entender el racismo que está asociado a la enfermedad que ha causado más de 3.300 muertes en el mundo.
“Cuando nos centramos únicamente en los efectos del coronavirus sobre la salud, no vemos los efectos sociales que han surgido, donde el racismo ha encontrado otra excusa”, escribió.
El joven dijo que había escuchado historias y visto videos de agresiones, pero que nunca pensó que le pasaría a él.
El lunes, cerca de las 21.15, pasó junto a un grupo de hombres que lo quedaron mirando y se dio vuelta y se puso a observarlos.
Uno de ellos le gritó “no te atrevas a mirarme”, y en “tres segundos” estaban encima de él cerca de 5 hombres y una mujer,. no mayores de 20 años, apunta.
Ahí fue agredido con varios golpes de puños en la cara y uno trató de patearlo y dijo “no quiero tu coronavirus en mi país”.
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El mismo sujeto le propinó otro combo en la cara, lo que lo hizo sangrar profusamente de la nariz. Tras ello todos arrancaron antes que llegara la policía.
Mok terminó en el hospital, donde los doctores le indicaron que “había sufrido algunas fracturas en la cara y que podría necesitar una cirugía reconstructiva.
El joven dijo que sólo publicaba en Facebook, memes y cosas graciosas, pero que había querido hacer esto porque la lucha contra el racismo tiene que estar en el centro de atención.
“Estudié en Londres durante los últimos 2 años y cada año sufrí comentarios racistas”.
“La mayoría de nosotros tenemos antepasados de diferentes razas. ¿Qué deberíamos hacer con un singapurense que tiene un padre inglés y una madre china?”, agregó.
Mok afirmó que siempre había creído que el racismo se basaba en la estupidez, pero que ahora tiene muy claro que “el racismo es odio. Los racistas constantemente encuentran excusas para exponer su odio, y en este contexto actual del coronavirus, han encontrado otra excusa más”.
Siente que la gente puede criticarlo porque no se defendió, o incluso por mirar al grupo se hombres, pero se pregunta: «¿Por qué alguien, simplemente por el color de su piel, debe ser objeto de abuso, en cualquier forma, verbal o física?».